Una ilusión, que nunca existió.

Tiempo después de haberlo conocido en el colegio, me di cuenta de que era ese tipo de persona que me llamaba la atención, era un hombre lleno de valores, una persona que para mi era perfecta, pues aparte de su apariencia física...!Los ojos que se mandaba!... le lucia mucho su lindo cabello y esa profunda mirada.
A veces sentía que hasta me desvestía con ella.
Tenia una personalidad que hacía que me volviera pero loca por el, un chico respetuoso, honesto, cariñoso y fiel.

Todo comenzó en aquella clase de matemáticas, cuando Matilde,-la profesora- explicaba algebra rápidamente, la verdad no le entendí nada, así que ella decidió ponerme un monitor, para mi sorpresa, era aquel chico que me llamaba la atención.

El tiempo iba pasando y cada vez pasaban cosas que para mi vida serian recuerdos inolvidables, como por ejemplo:

…Recuerdo aquel día en una cena romántica, cuando con sus labios roso los míos, haciendo de ese encarrete, la magia del amor…
…Recuerdo nuestra primera salida juntos, la pena que manejábamos, para decirnos cualquier bobada…
…Recuerdo aquella vez que me invito a casa para conocer sus padres, los cuales me parecieron muy queridos…
…Recuerdo nuestra primera sena juntos, en donde el me invito a pasar una buena noche…
…Recuerdo aquella vez en la que salimos con mis amigas, y el me pidió que fuera su novia…

En fin, son miles de recuerdos tan románticos, que siempre quedaran guardados en lo mas profundo de mi corazón. ¿Cómo olvidar el chico que siempre soñé y ahora aparece al frente mío? Esto se me hacia muy difícil, pero tiempo después me di cuenta de que no era necesario, pues al fin y al cabo lo tenia a mi lado, era un hombre que me hacia encontrarle el lado bueno a cada momento que ocurría en mi vida, un hombre que no era celoso, un hombre que era cordial; en fin, tenia miles de cualidades que para mi era mi chico perfecto, hasta que llego mi madre y dijo:

- hija levántate, es hora de ir al colegio, y acuérdate que hoy es pico y placa.
La niña muy triste y desilusionada de su “amor”, se levanto y se organizo para ir a la escuela.

Diana Carolina Tobón Cadavid - Grado 8.